Cuando entré, amiga mía,
en el gran palacio de tu amor,
se me rompió en la mano el frasco de perfume.
Se rompieron en mi boca las palabras,
y se rompió la expresión.
 
Sigo sintiéndome pequeño, amor mío
siempre que viajo por tus ojos.
Siempre que miro tus manos
me siento pequeño.
Siempre que me acerco a tu belleza salvaje, amor mío,
me siento pequeño.
Siempre que repaso mis escritos,
antes de verte, amor mío,
me siento pequeño.

Commentaires

Les plus consultes

هذه يدي ممدودة

I. EL PAR DE GUANTES : Charles Dickens

Mohamed Berrada