El niño que estaba plantando clavos!

El niño que estaba 

plantando clavos!

Un niño pequeño tenía mal genio. Su padre le dio una bolsa de clavos y le dijo que cada vez que perdía la paciencia, debía colocar un clavo detrás de la cerca. El primer día, el niño plantó 37 clavos detrás de la cerca. Durante las siguientes semanas, mientras aprendía a controlar su estado de ánimo, estaba plantando cada vez menos clavos detrás de la cerca ... Le resultaba más fácil controlar su estado de ánimo que colocar clavos detrás de la cerca. ...

Llegó el día en que controló su estado de ánimo durante todo el día. Después de informar a su padre, le sugirió que se quitara un clavo todos los días y comprobó su estado de ánimo. Los días pasaron y el joven finalmente pudo anunciar a su padre que ya no había más clavos que quitar de la cerca.

Su padre lo tomó de la mano y lo llevó a la cerca. Él le dijo: "Tú trabajaste duro, hijo mío, pero mira todos esos agujeros en la cerca, y ella nunca volverá a ser como estaba.

Cada vez que pierdes la paciencia, deja cicatrices exactamente como estas. Puedes poner un cuchillo en un hombre y quitarlo, sin importar cuántas veces le digas que lo lamente, la cicatriz permanecerá para siempre.

La ofensa verbal es tan dañina como una ofensa física.